Pequeñas burbujas: Fotografíar gotas de agua
Los métodos para explorar en la fotografía son casi infinitos, pero una especialidad que se suele pasar por alto es el mundo de la macrofotografía. No solo es divertidísima, sino que también se puede utilizar en casi cualquier lugar. Esto representa una gran ventaja en los casos en los que no tenemos a mano un animal exótico, un modelo profesional o un paisaje espectacular.
Hace unos años, decidí incursionar de lleno en la macrofotografía de interiores. Por eso, construí una mesa para montajes que habría de permitirme tomar fotografías sin importar el clima, la estación o la hora del día. Simplemente es una superficie nivelada con un área pequeña en el centro que me permite estar físicamente presente en la zona de tomas. Esta es una cuestión importante, ya que quería poder manipular la composición y ajustar la luz o el objeto sin tener que subirme a la mesa y, posiblemente, desacomodar el delicado montaje.
Mis primeras macrofotografías eran de objetos comunes como flores, plumas y demás. Era muy divertido crear las imágenes, pero sabía que precisaba imponerme otros desafíos. Sentía que las flores eran tan bellas de por sí que me daban una ventaja a la hora de tomar una fotografía bonita. Lo que quería probar era algo más abstracto y técnicamente desafiante. Por lo tanto, empecé a fotografiar artefactos de la cocina, insumos de oficina y objetos aleatorios de modos en los que se mostraran interesantes.
Una tarea que me habían dado cuando estaba en la escuela de arte me resultó sumamente inspiradora. Esta consistía en fotografiar un lugar común, un objeto de la casa de forma profundamente atractiva. Sin embardo, el espectador no debía ser capaz de identificar el objeto en la imagen final. En otras palabras, si el espectador podía identificar el objeto, no aprobaba la tarea. De esta forma, tenía que mirar los objetos más comunes y transformarlos, mediante la fotografía, en imágenes interesantes. Fue un gran proceso que me ayudó a mejorar las imágenes, porque debía descartar todas las soluciones obvias, simples y comunes. Así, empezaron a surgir imágenes innovadoras y perspicaces.
Finalmente, un día me vi inmerso en las gotas de agua. Ya había visto imágenes de gotas de agua antes, pero quería exigir aún más la técnica, ver realmente cuán lejos podía llevarla—y qué podía aprender en el trayecto.
El montaje
El proceso comienza tomando una lámina de vidrio como superficie para las gotas de agua. Es importante usar la lámina más delgada posible para que tenga un impacto mínimo en la calidad óptica de lo que se magnifica detrás. También descubrí que el vidrio de bajo contenido de hierro reduce significativamente el tinte verde que se ve en los vidrios comunes.
Decidí crear mi propia mesa de soporte con tuberías de ABS que compré en una tienda de artículos para el hogar. Quería contar con la posibilidad de ubicar una segunda lámina de vidrio por debajo de la lámina superior y, a la vez, poder variar la separación entre las dos láminas. La segunda lámina tendría la posibilidad de sostener objetos transparentes, traslúcidos u opacos. Al modificar la separación, también tendría la posibilidad de cambiar el tamaño del objeto dentro de cada gota de agua.
Prácticamente, es una serie de capas que comienza con las gotas en la capa superior, el objeto por debajo de las gotas y el fondo detrás del objeto. La relación espacial entre las capas es importante y varía en función de la ampliación del lente, del tamaño de la gota, del objeto y del diafragma del lente utilizado.
Un aspecto esencial a tener en cuenta para conseguir buenas fotografías de gotas es la alineación del sensor de la cámara y el vidrio que contendrá las gotas de agua. Luego de colocar la cámara en un trípode firme, usé un nivel de burbuja para asegurarme de que se encuentren exactamente en paralelo. Si no están perfectamente alineadas, solo la parte del marco se enfocará con claridad.
Mi lente favorito para este tipo de creación de imágenes es el AF-S VR Micro-NIKKOR 105mm f/2.8G IF-ED, aunque hay muchos otros lentes macro de Nikon que uso— en función de la imagen.
El paso siguiente es elegir un objeto interesante para que las gotas de agua lo magnifique. Cuando recién se está empezando, usar una lupa puede ser útil para obtener una vista previa de cómo los distintos objetos se verán dentro de las gotas de agua. La lupa simulará la curvatura que se ve en las gotas de agua y facilitarán la elección del objeto. Después de tomar algunas buenas fotografías, podrá predecir con certeza qué objetos se verán bien. Por lo general, los objetos bien con una buena definición, con bordes puntiagudos o patrones definidos son los mejores. ¡Aún así, no hay límites!
Armonización de la luz, el color y el fondo
Esta etapa es un buen momento para pensar en la luz, color y fondo, y cómo los tres trabajan en armonía con el objeto. Por supuesto, se pueden tomar fotografías de gotas de agua solo con la luz disponible, pero las posibilidades se amplían mucho más cuando se agrega luz direccional a la imagen. Descubrí que incluso el uso de un solo flash permite darle contorno al objeto de forma mucho más interesante. El uso de uno o dos flashes adicionales permite iluminar los fondos por separado, agregar colores a cada uno, y tratar cada capa de la imagen como elementos distintos.
Una vez elegido el objeto y el fondo y establecida la iluminación, todas las superficies de vidrio se deben limpiar minuciosamente y quitar todo rastro de polvo. Luego, hay que recubrir la capa de vidrio superior con un producto que suele usarse para convertir el agua en perlas de agua en los parabrisas de los autos—, disponible en la mayoría de las tiendas de insumos para autos (yo uso Rain X). Esto hará que las gotas de agua se formen de manera correcta y mantengan su forma. Solo que hay rociar la superficie y distribuirlo uniforme y minuciosamente sobre la zona en la que pondrá las gotas. Esta zona suele ser de unos pocos centímetros de diámetro, por lo que no hace falta recubrir toda la placa de vidrio. Déjelo reposar así se seca y se vuelve borroso. Luego, límpielo hasta que se vuelva transparente.
Lo próximo que debe hacer es colocar las gotas de agua sobre la superficie del vidrio. Si bien puede ser tentador rociar el agua con un pulverizador, de hecho, es más eficiente inyectar las gotas con agujas hipodérmicas de distintas medidas. Descubrí que inyectar agua destilada con una aguja facilita la colocación de las gotas de agua en la ubicación exacta necesaria dentro del cuadro. Además, las agujas permiten variar el tamaño de cada gota al agregarles o quitarles líquido. De más está decir que este proceso requiere de paciencia y de muy buen pulso. Aún así, me di cuenta que es la mejor forma de colocar las gotas con precisión como uno lo desea.
Con la experimentación logrará mejores imágenes, y una vez que todo esté en su lugar, el resto es solo probar qué queda mejor. La relación espacial entre el lente de la cámara y cada una de las tres superficies, y su relación entre ellas influye con intensidad en la apariencia de la imagen final.
Estos son algunos principios que se aplican a la fotografía de gotas de agua y que pueden ayudar a lograr grandes imágenes desde el primer intento:
-
Espaciado entre el lente y el vidrio: Determina el tamaño de las gotas dentro del marco y la nitidez relativa del fondo.
-
Espaciado entre el vidrio y el objeto: Determina el tamaño del objeto dentro de cada gota.
-
Espaciado entre el objeto y el fondo: Crea profundidad y amplía las posibilidades de la iluminación.
-
Apertura del Lente Determina la profundidad de campo dentro de las gotas y del objeto debajo de las gotas.
La fotografía de gotas de agua puede ser muy gratificante, ya que en todo momento la imagen es una creación de la imaginación del fotógrafo. En lugar de “tomar fotografías”, lo que hará principalmente “es crear las imágenes y prestar especial atención a cada detalle. Es una oportunidad para experimentar, jugar, descubrir y perfeccionar sus habilidades como fotógrafo. Además, durante el proceso, creará arte en todo sentido de la palabra.
Resumen del montaje paso a paso:
-
Crear una mesa de soporte para apoyar las láminas de vidrio y el/los objeto/s y las gotas de agua a colocar.
-
Posicionar la cámara sobre un trípode firme que apunte hacia abajo.
-
Alinear el sensor de la cámara con las láminas y las gotas con un nivel de burbuja para asegurar que las superficies estén perfectamente en paralelo.
-
Ubicar el objeto en la lámina de vidrio inferior.
-
Recubrir la lámina superior con un producto que haga que el agua se convierta en gotas. Dejarlo secar hasta que se vuelva borroso y, luego, limpiarlo hasta que se vuelva transparente.
-
Colocar las gotas de agua con cuidado sobre la lámina de vidrio superior.
-
Usar la luz disponible o uno o más flashes para agregar luz direccional. También se pueden agregar geles en los flashes adicionales que se usan para iluminar el fondo.